Los gastos innecesarios pueden tener un impacto significativo en tus finanzas personales y pueden ser una de las principales razones por las que las personas experimentan dificultades financieras.
Te comparto los gastos más comunes que estaban dañando mis finanzas:
1.- Compras impulsivas.
Comprar artículos que no necesitas o que no habías planeado adquirir puede llevar a gastos innecesarios que erosionan tu presupuesto.
2.- Comidas fuera de casa.
Comer fuera de casa con frecuencia puede resultar en gastos excesivos en comparación con preparar comidas en casa. Estos gastos pueden acumularse rápidamente y afectar tu presupuesto mensual.
3.- Suscripciones no utilizadas.
Pagar por servicios de suscripción que no utilizas regularmente, como membresías de gimnasios, plataformas de streaming, revistas o aplicaciones, es un desperdicio de dinero.
4.- Entretenimiento costoso.
Asistir a eventos, conciertos o actividades costosas con regularidad puede tener un impacto significativo en tus finanzas, especialmente si no estás controlando estos gastos.
5.- Compras por conveniencia.
Optar por comprar productos o servicios por conveniencia en lugar de buscar ofertas o comparar precios puede resultar en gastos innecesarios y mayores de lo necesario.
6.- Transporte excesivo.
Dependiendo de tu ubicación y estilo de vida, gastar en transporte innecesario, como viajes en taxi o servicios de transporte compartido, en lugar de utilizar opciones más económicas como el transporte público o caminar, puede afectar negativamente tu presupuesto.
7.- Productos de marca.
Comprar productos de marca en lugar de opciones genéricas o de menor precio puede resultar en gastos innecesarios, especialmente si no hay una diferencia significativa en la calidad.
8.- Tarifas bancarias y multas por retraso.
No estar al tanto de las tarifas bancarias o incurrir en multas por retraso en el pago de facturas puede ser un gasto evitable que afecta tus finanzas.
El nombre del enemigo es “Gasto hormiga”
Este tipo de gastos tienen un nombre, “Gastos hormiga”, se les da este nombre por que se trata de pequeñas compras o gastos diarios que, individualmente, pueden parecer insignificantes, pero que sumados a lo largo del tiempo pueden tener un impacto significativo en las finanzas personales. Estos gastos suelen ser impulsivos, pequeñas indulgencias o compras rutinarias que se realizan sin una planificación adecuada.
Algunos ejemplos comunes de gastos hormiga incluyen comprar café en una cafetería todos los días, comer fuera regularmente, comprar bocadillos o golosinas con frecuencia, suscripciones a servicios que no se utilizan, entre otros.
El impacto de los gastos hormiga en las finanzas personales puede ser considerable por varias razones:
Son acumulativos.
Aunque cada compra individual puede ser pequeña, cuando se suman a lo largo del tiempo, estos gastos pueden representar una parte significativa del presupuesto personal.
Dificultan el ahorro.
Los gastos hormiga pueden dificultar el ahorro regular, ya que el dinero que se destina a estos gastos podría haberse utilizado para ahorrar o invertir para metas a largo plazo, como la compra de una casa, el pago de deudas o la jubilación.
Son invisibles.
Debido a su naturaleza impulsiva o rutinaria, es posible que las personas no sean conscientes de cuánto están gastando en gastos hormiga. Esto puede llevar a una sorpresa desagradable cuando se revisan los estados de cuenta y se realiza un seguimiento de los gastos.
El mejor antídoto.
Parece mentira pero el simple hecho de eliminar estos gastos me permitió ahorrar el dinero suficiente para comprar mi primera casa, no de contado pero junté lo suficiente para el enganche y las primeras mensualidades, gracias a que sigo eliminando los “Gastos hormiga” tengo el dinero suficiente para las mensualidades de mi crédito e inclusive estoy considerando seriamente rentarla para tener una mayor liquidez.
¿Y tú?, ¿Cuando comienzas a invertir?
